Serrat va a dedicarle un segundo disco a Miguel Hernández ¡menudo par de dos! Así que hoy quiero compartir una vez más con quienes visitáis este blog, unos versos de Miguel Hernández. No son tal cual los escribió el poeta, pero fue necesario cambiarlos un poquito para convertirlos en canción.
Sangre que no se desborda,
juventud que no se atreve,
ni es sangre, ni es juventud,
ni reluce, ni florece.
Cuerpos que nacen vencidos,
vencidos y grises mueren:
nacen con la edad de un siglo
y son viejos cuando vienen.
Y como ya habréis imaginado, quiero dedicárselos a esos jóvenes que luchan para recuperar su patria. Miguel Hernández siguió con otros versos, también hermosos, pero que no comparto:
La muerte junto al fusil,
antes que se nos destierre,
antes que se nos escupa,
antes que se nos afrente
y antes que entre las cenizas
que de nuestro pueblo queden,
arrastrados sin remedio,
gritemos amargamente:
¡Ay, España de mi vida!
¡Ay, España de mi muerte!
Y no los comparto porque desde los oscuros años en los que escribió aquel pastor ingenuo y genial, creo que algo hemos avanzado.
Sangre que no se desborda,
juventud que no se atreve,
ni es sangre, ni es juventud,
ni reluce, ni florece.
Cuerpos que nacen vencidos,
vencidos y grises mueren:
nacen con la edad de un siglo
y son viejos cuando vienen.
Y como ya habréis imaginado, quiero dedicárselos a esos jóvenes que luchan para recuperar su patria. Miguel Hernández siguió con otros versos, también hermosos, pero que no comparto:
La muerte junto al fusil,
antes que se nos destierre,
antes que se nos escupa,
antes que se nos afrente
y antes que entre las cenizas
que de nuestro pueblo queden,
arrastrados sin remedio,
gritemos amargamente:
¡Ay, España de mi vida!
¡Ay, España de mi muerte!
Y no los comparto porque desde los oscuros años en los que escribió aquel pastor ingenuo y genial, creo que algo hemos avanzado.
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Actualización
Nuestra amiga Antònia hoy hace oír su voz en las páginas de EL PAÍS. Si quieres leer su mensaje, pincha aquí
3 comentarios:
Hemos avanzado hasta cierto punto. No tenemos fusiles pero ¡Ay, España de mi vida! ¡Ay, España de mi muerte! me suena mucho a las dos Españas de Machado y yo las veo latentes... Esperemos que la sangre no llegue al rio...
¿Has leido la carta, en primera plana, en "El País" de hoy de nuestra querida ANTÒNIA? Qué bien que el tema Aminetu está teniendo tanta repercusión mediática. Es un gran paso para conseguir la liberación del Sáhara Occidental. Vamos por el buen camino. Besotes, M.
Merche
No había visto la carta de Antònia ¡¡¡ Menudo despiste !!! Gracias por el silbidito ;-)
Gracias por los versos querido Francisco. Vi la carta.
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