17 octubre 2008

Ladran, luego cabalgamos


Quienes se comprometen por lo demás deben asumir las críticas. Es un peaje que habrá que pagar con gusto. Las hay de todo tipo:


Traer niños aquí un par de meses, para que vean lo bueno y luego sufran allí; mejor harían arreglando primero su casa; pero ¿por qué demonios tenemos que ayudar a esos saharauis, o moros, o qué sé yo lo que son?...


Sin embargo, debemos mirar la parte positiva: cada una de las críticas que recibimos –hasta las de los enviados especiales de Naciones Unidas- indican que nos estamos moviendo, que lo que hacemos tiene repercusión. Por eso mismo, el 15 de noviembre iremos a Madrid, para que se oiga nuestra voz con claridad y nitidez a favor del pueblo saharaui. Desde aquí, debo confesar que no comparto algunos de los gritos que se corean, ni me siento representado por algunas de las banderas que se enarbolan. Pero como estoy de acuerdo con la sustancia de la manifestación que nos convoca, allí estaré.

La cita “Ladran, luego cabalgamos” se atribuye erróneamente al Quijote de Cervantes. La causa más probable puede tener su origen en un guión de Orson Welles para una película que no llegó a concluirse y en la que sí aparece la famosa frase.
Si te interesa El Quijote, como aventura compartida, no dudes darte una vueltecita
por aquí ¡Y por el resto de ese blog! Merece la pena.
.
Actualización del 18 de octubre
Acabo de leer la página de Arturo Pérez Reverte en el XL SEMANAL de hoy. Termina con la frase que encabeza este post, aunque trata sobre un tema absolutamente diferente. Es agradable coincidir con don Arturo, que por cierto, en su juventud cubrió como reportero los últimos meses de la presencia española en el Sáhara Occidental

2 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Siempre cervantino, querido Fran, aunque sea, como dices por atribución incorrecta.
Siempre se critica al que hace cosas. Sigamos. Que ladren.

Francisco O. Campillo dijo...

Pedro
... siempre nos quedará Cervantes.