La atleta Marta Domínguez ha sido acusada de los más terribles delitos que pueden imputarse a un deportista. Y al final... nada de nada. Bueno, nada no. Su imagen ha sufrido un serio varapalo y siempre habrá quienes piensen que "algo habrá" ¿Qué decir de los medios que dedicaron portadas a las acusaciones, y ahora, espacios tangenciales a la decisiones judiciales que favorecen a Marta?
Mis hijas son atletas, por eso estoy aprendiendo a amar este deporte. Y creo en un atletismo limpio. Así que me gustaría que Marta pudiese restañar su buen nombre en las pistas, una vez más. Y que la limpieza llegase a los dirigentes deportivos que han actuado con una torpeza mayúscula, anteponiendo sus cargos al buen nombre del deporte que debieran defender. Sobre los medios de comunicación prefiero no opinar. Algunos colaboran con ahínco a que su profesión descienda a niveles difíciles de superar.
5 comentarios:
Estoy totalmente de acuerdo con el post, porque al final, por no hacer las cosas bien, pierden los aficionados de verdad que son los que sostienen el deporte
En efecto, los medios se explayaron en el asunto (y algunos, entre los que me incluyo, nos lo creímos). No sé si es una cuestión de mala praxis policial, judicial o periodística, pero ahora el daño está hecho.
Ese acoso fue terrible. Estoy harta de los medios que con tal de vender se apuntan al más mínimo indicio de escándalo sea en el deporte, en la cultura o en la política. Indignante. Besotes, M.
Los medios de comunicación y su necesidad de tener noticias cada minuto son atroces.
En este caso no se respetó la presunción de inocencia. Los medios no deberían apuntarse al sensacionalismo barato más propio de tabloides btitánicos que de medios serios. Pero...hay que vender.
Un abrazo. Espero que goces ya del merecido decanso veraniego.
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