31 agosto 2008

Tolerancia y un par de aclaraciones

La verdadera tolerancia no consiste en permitir que cada uno exprese su opinión, sino en partir de la base de que quien piensa de forma diferente a nosotros puede tener la razón. Así me lo explicaba un profesor en mi temprana juventud y tengo la impresión de que la inmensa mayoría de quienes visitáis CAMINANDO suscribiríais esas palabras. Los comentarios al último post han sido un ejemplo de esa tolerancia constructiva. Los agradezco sinceramente –aunque estemos en desacuerdo- y aprovecho ese espíritu para aclarar un par de aspectos que me parecen importantes.

Cuando Peter van Walsum hace pública su opinión sobre el conflicto saharaui, debemos recibirla como la de alguien que ha dedicado tres años de su actividad diplomática a enconutrar vías de solución para este conflicto enquistado, y reconoce su fracaso. Culpabilizar a Van Walsum no sólo sería una injusticia, sino un tremendo error de análisis. Evidentemente que su gestión tiene claroscuros, pero si Naciones Unidas tuviese la firme intención de resolver este conflicto no estaríamos ahora como estamos.

El segundo aspecto sobre el que quiero dar mi opinión es el hipotético retorno a las armas por parte del Polisario. La construcción del “muro de la vergüenza” supone que el modelo de guerra de razzias que se desarrolló hasta el alto el fuego de 1991 está abocado a convertirse en una masacre… para los saharauis, naturalmente. Si esto no fuese suficiente -y como efecto colateral del 11S- hasta el más inútil de los “creadores de opinión” lo tendría sencillísimo para equiparar Polisario y terrorismo en un escenario de violencia al margen de la guerra “convencional”. Naturalmente que sería una injusticia y una falsedad, pero las consecuencias de esa asociación de conceptos no es necesario que las ponga sobre la mesa ¡son tan evidentes!

Aquí hablamos de temas muy delicados, y a la vez de una importancia fundamental. Hablamos de libertad y de justicia, de futuro y de esperanza. Del derecho que tenemos todos –y todas- a disfrutar de las mismas oportunidades, a la libre expresión y a vivir pacíficamente en nuestra tierra. Por todo ello, infinidad de personas han dado su propia vida y algunas sufren torturas y vejaciones en estos mismos momentos. Así que debo reconocer que resulta extremadamente sencillo teorizar desde la comodidad de estar sentado frente al ordenador. Aún así, continuaré exponiendo mi punto de vista. No sabría como callarme. No soy saharaui, simplemente ciudadano de este pedrusco que vaga por el Cosmos. Esa es mi legitimidad.

P.S. Después de releer el post, debo reconocer que transmite un panorama desolador. Así que me gustaría dejar un poso de optimismo. Algunas veces, cuando parece que todo está perdido, la tenacidad, la capacidad de adaptación, la habilidad para concitar apoyos y adhesiones…. pueden provocar el milagro ¿Cómo llamaríamos si no al hecho de que un preso político víctima de un larguísimo cautiverio alcanzase la presidencia de su país y el unánime reconocimiento internacional?

6 comentarios:

Unknown dijo...

Fran puede que tu profesor tuviera razón pero yo prefiero traer a colación a Lutero cuando decía: no puedo verlo de otra manera.
Prefiero cometer mis propios errores, puedo asumirlo pero me sería difícil asumir lo de los demás.
Claroscuros hay muchos. Se ha dicho que entre el Secretario general y su ex envíado había "desavenencias". Creo firmemente que Van Walsum nunca debería haber expresado sus puntos de vista mientras fue mediador. Pienso que ha estado sometiendo a los que ayudamos al pueblo saharaui a un chantaje moral, el más despreciable de todos. Porque poner sobre la mesa los "sufrimientos de los refugiados" e incitarnos a dejar de ayudarles a resistir para que acepten la autonomia es profundamente inmoral aunque sea todo lo realista que quieras, ahora mismo. Mañana sólo Dios lo sabe.
El concepto de terrorismo depende de quien lo formule. Cuando se lucha contra un ejército perfectamente equipado, bastante inferior en número y sin su sofisticado material de guerra, alguno regalado amablemente por España, nunca se le podría llamar terrorismo sino guerrilla.
Pienso que no tardaremos mucho tiempo en ver a Van Walsum al frente de alguno de los lucrativos negocios de su majestad o en alguna empresa relacionada con la fortuna real. Es sólo una intuición y me gustaría equivocarme. Decidan lo que decidan, los saharauis siempre tendrán mi apoyo.
Un abrazo.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

A veces, la tenacidad es la mejor forma de optimismo.

Anónimo dijo...

Francisco, en primer lugar decirte que yo si suscribo las palabras de tu sabio profesor, respecto a la tolerancia, sin dudarlo ni un segundo.
Por otra parte, y haciendo uso de esa tolerancia por la que todos abogamos, discrepo de nuevo contigo. Yo no he percibido que Walsum haya dedicado tres años a encontrar vías de solución para el conflicto que nos ocupa. Si creo que en los comienzos de su actividad en el cargo, creyó en la posibilidad de hallar la solución, y no seré yo quien discuta que luchó por ello. Sin embargo, con el paso del tiempo, el supo que cualquier intento por la vía previamente establecida por NNUU, no sería fértil (creo que lo deja claro en sus recientes explicaciones), y sin embargo se agarró a ese sillón que se hacía más y más grande, a medida que su carisma se empequeñecía, sometido a los deseos de sus superiores. Nunca comprenderé ese afán de poder que abunda en la clase política, a pesar de cosechar un fracaso detrás de otro. Si volvemos la vista atrás, todos recordaremos cuando James Baker no dudó en dimitir, cuando su plan no fructificó, a pesar de contar con un amplio apoyo internacional.
Espero no haber molestado a nadie con mi opinión.
Un saludo.

Merche Pallarés dijo...

Efectivamente, querido Fran, Mandela es el gran ejemplo de cómo ganar la batalla desde una base pacífica y...MUY paciente... Besotes, M.

Francisco O. Campillo dijo...

Antònia
Estamos de acuerdo en que Van Walsum debió reservarse su opinión personal durante el ejercicio de su misión diplomática. Así le he dejado dicho en CAMINANDO y ese es su mayor error desde mi punto de vista.
En cuanto al terrorismo... No se trata de lo que podamos pensar tú o yo, sino de lo sencillo que sería identificar al Polisario con el terrorismo en un hipotético retorno a las armas y las nefastas consecuencias que ello tendría para la causa saharaui.

Pedro
a veces no tenemos otra forma de optimismo ;-)

Xela
Al menos, estaremos de acuerdo en que Van Walsum es únicamente un instrumento de Naciones Unidas que han demostrado su incapacidad en este conflicto.

Merche
Leí hace unas semanas una amplia entrevista a quien ha sido -y sigue siéndolo en la actualidad- la secretaria personal de Mandela. Muy esclarecedora... y muy esperanzadora.

Anónimo dijo...

En lo referente al retorno a la lucha armada, y las desavenencias que supondría el muro, quisiera hacer una aclaración:
Cuando dieron por acabada la construcción del muro, en 1984, fue varias veces y en varios punto destruido y los guerrilleros (o soldados) del Polisario lograron pasar. No creo que eso cambie, si se vuelve a la lucha armada.
De terrorista, marxistas, lenenistas, y comunistas ha sido siempre disfrazado el Polisario por Marruecos, durante y después de la guerra fría. Ninguna funcionó, ni nadie les creyó. Sobre todo teniendo en cuenta resulta inverosimil decir que alguien puede quitarse la boina del Ché y sustituirla por el turbante de Ben Laden en cuestión de segundos.
Saludos de un Saharaui