Muchas veces me planteo si este blog sirve realmente para algo ¿Hay alguien leyéndolo?
Hace año y medio emprendí esta aventura, entre otras cosas, para no aburrir a mis amigos con cientos de emails sobre cada una de las cosas que se me ocurren. Por eso, en cuanto tuve la oportunidad, me sume a la comunidad de bloggers. Este es un lugar abierto; una jaima con la puerta amplia. Vienes cuando quieres, si te gusta te quedas un ratito, tomas un té, y tienes la libertad para invitar a tus amigos o para decidir no volver ¡Ojo! Yo hago todo lo que puedo para que tu visita sea agradable, aunque intente cuestionarte algunas cosas constantemente. Las respuestas son escasas. Pero algunas veces, son muy alentadoras. Esta entrada está dedicada a dos de esas respuestas. Es un homenaje.
Agaila es la primera saharaui graduada en los Estados Unidos. Ahora estará con su madre después de seis años de separación. Su padre murió en combate.
Iratxe es una joven cineasta que construye puentes entre los campamentos de refugiados y los estudiantes saharauis que viven en Cuba. Algunos de ellos no ven a su familia y a sus amigos durante quince años. Un drama que se suma a su exilio.
Agaila e Iratxe se han conocido gracias a este blog y ahora están trabajando para favorecer la comunicación entre las familias saharauis y sus hijos que estudian en Cuba. Podemos crear puntos de conexión a través de Internet, redes de contactos, voluntarios que transporten paquetes… ¿Qué se yo? Lo realmente importante es que está germinando una extraordinaria idea. Un proyecto abierto en el que espero poder cooperar. Me gustaría que Iratxe y Agaila contasen conmigo… y que yo sea capaz de estar a la altura de su compromiso.
Algunas veces -sólo algunas veces- pienso que este blog, realmente merece la pena.
Agaila es la primera saharaui graduada en los Estados Unidos. Ahora estará con su madre después de seis años de separación. Su padre murió en combate.
Iratxe es una joven cineasta que construye puentes entre los campamentos de refugiados y los estudiantes saharauis que viven en Cuba. Algunos de ellos no ven a su familia y a sus amigos durante quince años. Un drama que se suma a su exilio.
Agaila e Iratxe se han conocido gracias a este blog y ahora están trabajando para favorecer la comunicación entre las familias saharauis y sus hijos que estudian en Cuba. Podemos crear puntos de conexión a través de Internet, redes de contactos, voluntarios que transporten paquetes… ¿Qué se yo? Lo realmente importante es que está germinando una extraordinaria idea. Un proyecto abierto en el que espero poder cooperar. Me gustaría que Iratxe y Agaila contasen conmigo… y que yo sea capaz de estar a la altura de su compromiso.
Algunas veces -sólo algunas veces- pienso que este blog, realmente merece la pena.
Acabo de recibir un email de Iratxe. Ya disponemos de una web para impulsar este proyecto. Puedes visitarla en
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