El 27 de febrero de 2007 se han cumplido treinta y un años de la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática, RASD. Lamentablemente, no hay nada que celebrar, porque estamos hablando de un pueblo exiliado y expulsado de su patria. Sin embargo, la esperanza en el triunfo de la Justicia no se ha debilitado entre quienes se enfrentan cada día a la pasividad de la Comunidad Internacional. Son los que viven en la hamada de Tinduf, y quienes defienden sus derechos en su tierra ocupada violentamente.
Ahora hace un año, colaborábamos en la publicación de un libro sobre la historia de este proceso, "Una Realidad Irreversible". Tres palabras que condensan el anhelo de un pueblo.
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