11 febrero 2007

Aviso a navegantes

Tan importante –o incluso más- es la manera que tenemos de hacer las cosas que las acciones mismas. Esto es aún más cierto en el ámbito de un proyecto de cooperación internacional que pretende impulsar valores educativos.
Un grupo de compañeros ha regresado de la hamada. Ahora debemos ser capaces de poner esas energías al servicio del compromiso compartido y adquirido de forma voluntaria y libre. Tenemos la obligación de exprimir el torrente de aportaciones que quieran adherirse a este ilusionante proyecto y de facilitar las vías para que no se desperdicie ni una sola idea.
Nos equivocaremos infinidad de veces. Y juntos corregiremos nuestros errores. Porque estamos aprendiendo a superar obstáculos y a cooperar hombro con hombro.

No hay comentarios: