20 enero 2011

Al otro lado del limes


Al otro lado de nuestro limes, arde por sus cuatro costados una dictadura que, solo hace cuatro días, considerábamos una democracia amiga. Habrá algunos sátrapas vecinos que teman que mañana los caballos del pueblo pisoteen esos palacios de invierno en los que se resguardan del sofocante calor. Y seguro que son muchos los que esperan que los vientos de libertad rolen hacia el oeste. Pero que nadie se precipite tocando tambores guerreros, porque con ello convocarán la tormenta y, tal vez, ahuyenten la lluvia purificadora. No conviene olvidar que esa lluvia solo sirve a la voz de los pueblos que se manifiestan de manera libre; ya sean los que duermen bajo jaimas en el exilio, o los que luchan por recuperar la dignidad pisoteada en la patria invadida.
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La foto está tomada de la Red
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Actualización del 21 de enero
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3 comentarios:

Merche Pallarés dijo...

¿Qué es limes? Besotes, M.

Francisco O. Campillo dijo...

El "limes" era la frontera entre el Imperio romano y los plueblos bárbaros que acechaban desde el norte. Hoy en día, ese límite no está al norte, sino al sur.

P.S. Por cierto, ya los romanos fijaron el "Limes africano", que los separaba de los bereberes; qué previsores ;-)

Merche Pallarés dijo...

¡Vaya! Gracias por la explicación. Besotes, M.