Hoy parece obligado hablar del 23F, así que procuraré escabullirme, o no. Aquí os traígo una foto que para mí resulta un icono. El de la gorra de soldado y el tres cuartos -los mismos que llevaban todos los varones que por aquel entonces hacían la mili obligatoria- es el Rey de España. Le acompaña uno de los generales con más prestigio en ese momento, y que a la sazón dirigía la División Acorazada Brunete. Ambos comen un bocadillo, y Milans lo mira como diciendo: vaya mierda que me tengo que comer por culpa del borboncito.
Cuatro años más tarde, el general y sus amiguitos quisieron hacernos tragar a todos los demás, pero en aquella ocasión, el Borbón supo estar a la altura.
1 comentario:
A lo mejor el general llevaba dentadura postiza. Tampoco hubiera sido tan raro.
Un abrazo.
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