Baba, Ahmed, Salka, Yminaya y todos los demás le han hablado tanto de España… Del mar que es tan grande como el desierto pero tan diferente que no se puede explicar.; de las piscinas, de las montañas, de los bosques… ¿cómo serán todas esas cosas fantásticas?
Este curso me he esforzado de verdad. Hace sólo unos días la señorita me felicitó delante de todos por mi redacción. Echaré de menos a mis padres y al pequeño Cajalús pero ¡tengo tantas ganas de salir!
Unas camisetas –Mohamed le ha regalado esa del Barça que sabe que le gusta- dos pares de zapatillas, calcetines, una chaqueta… Machado hubiese sonreído al ver su equipaje. Cada vez queda menos. Algunas noches de insomnio, las lágrimas de la despedida, la larga espera en el aeropuerto de Tinduf y ¡comienza la aventura!
Atrás quedará la Hamada, a la que la faltarán sus sonrisas más hermosas. Serán sólo dos meses, los más duros y despiadados; los que tendrían que ser los últimos.
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