04 octubre 2007

Miguel Barrachina


Esta mañana, Miguel Barrachina ha visitado “Caminando…” y ha dejado su comentario. Conozco a Miguel de forma indirecta porque compartió con algunos de mis compañeros del proyecto “Ladrillo a ladrillo – Aidic faidac” algunas jornadas en los campamentos de Tinduf. Además, Miguel es diputado por el Partido Popular y se ha destacado en la defensa de la infancia saharaui exilada.

Por todo ello, me atrevo a plantearle cuatro propuestas. Aquí están:


1- Responder a las demandas de enseñanza del español entre el pueblo saharaui. Tal vez la mejor herramienta sea la fundación de una sede del Instituto Cervantes en los campamentos de la hamada argelina. Tal vez.

2- Cofinanciar el proyecto promovido por Naciones Unidas que facilita los encuentros familiares entre los campos de Tinduf y el Sáhara Occidental. Ver más información

3- Facilitar los medios materiales indispensables a los profesionales sanitarios en los campamentos de refugiados.

4- Crear una línea especial de becas que permita a los jóvenes saharauis cursar estudios superiores en España.

Estas cuatro medidas tienen un reducido coste económico, se pueden aplicar de manera inmediata y podrían ser un primer paso. El Parlamento debe promoverlas, pero si queremos avanzar, no podemos hacer de la causa saharaui un arma arrojadiza en nuestras disputas internas. Tal vez peque de ingenuo, pero considero posible un acuerdo de mínimos entre los grandes partidos españoles en este sentido. La deuda histórica que mantenemos con nuestros amigos del desierto nos exige esa mínima generosidad. Y a partir de ahí, seguiremos caminando.

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